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Más allá de los hitos sobre las pasarelas o la elegancia innata que reflejan sus looks, clave en cómo ha mantenido su etiqueta de icono de estilo para toda una generación de mujeres durante décadas, el éxito de Cindy Crawford en redes sociales está en la naturalidad que desprende. Si bien sus últimos proyectos profesionales no faltan en su feed, son las imágenes y vídeos dando detalles de su lado más personal, sin filtros ni añadidos, lo que despunta en su perfil y enamora a los casi ocho millones de seguidores que reúne. Publicaciones con las que deja ver una parte de ella hasta ahora desconocida e incluso con la que muchas pueden sentirse identificadas, como en el caso de su último post.

"My favorite Sunday Night things" (Mis cosas favoritas los domingos por la noche), escribía Crawford junto a una pequeña enumeración de aquello que adora hacer el último día de la semana: estar sin maquillaje, recogerse el pelo, un outfit cómodo y un vaso con tequila con soda. Cuatro pequeños gestos que ella misma refleja en el selfie frente al espejo que acompaña el texto.

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En este post, la propia Cindy se muestra sin maquillaje, ni filtros ni retoques, con un desenfadado recogido alto, camisa blanca oversize de la firma Xirena y pantalones negros holgados de Bleusalt. Una imagen con la que cualquiera puede sentirse identificada y que define a la perfección ese lado humano y natural que tanta empatía genera al otro lado de la pantalla.

Los comentarios resaltando la belleza de la modelo y la sencillez con la que se muestra ante sus fanáticos no se han hecho esperar.

A sus 57 años, la supermodelo estadounidense ha demostrado en reiteradas ocasiones no tener miedo a mostrarse tal y como es ante las cámaras. Una hazaña realmente alabada en pleno 2023 y que, casi sin quererlo, le sitúa como una de las grandes abanderadas de la belleza real, más allá de retoques, filtros y por supuesto, por encima de cualquier edad.