Hay una norma no escrita pero mundialmente conocida en el armario femenino que podría decir así: "Si encuentras unos vaqueros que te gustan, agárrate bien a ellos. Nunca sabes cuándo volverás a encontrarlos". Es así. Y quien diga que no se ha desesperando saliendo a comprar jeans, miente. Por eso Bella Hadid, sacando a relucir su faceta más mortal, ha contado al mundo que ella lo sufre igual que todos y que, ahora que ha encontrado sus vaqueros favoritos, piensa amortizarlos hasta aburrirnos.
En la última semana se ha dejado ver con este par de jeans de corte recto, tiro alto y aberturas en las rodillas. Con ellos se ha dejado ver en la Fórmula 1 en Mónaco, en Londres y en Nueva York. Hasta un total de cuatro veces en menos de una semana.
Y hay una cosa que no podemos negar a Bella: los habrá repetido sin piedad, pero lo ha hecho muy bien. Tanto que, si no fuera por lo marcadas que son las características del diseño, podría habernos hecho pensar que son pantalones distintos. Los ha llevado al día, con deportivas y top de tirantes rojo, y a la noche con body negro y salones del mismo color; pero también en un vuelo transatlántico, combinado con top rojo de manga larga y las zapatillas Triple S de Balenciaga y, al llegar a Nueva York, adaptado a la primavera cambiando el jersey por un top a cuadros anudado debajo del pecho.
Los vaqueros en cuestión cuestan 139 euros y forman parte de la colección cápsula que ha hecho la estilista Elizabeth Sulzer con la firma Miss Sixty, y son la nueva (gran) obsesión de la pequeña de las Hadid.
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