- Costa Brava: un viaje singular de pueblo en pueblo
- De Formentera a la Polinesia francesa: un viaje por las islas de aguas turquesas
En una de las paredes de las torres bermejas de la Alhambra de Granada se divisa una frase que Francisco de Icaza dedicó a la ciudad de su mujer, Beatriz de León y Loynaz: "Dale limosna mujer, que no hay en la vida nada, como la pena de ser ciego en Granada". Rechazar la veracidad de esta frase muestra tan solo el desconocimiento de una de las bellas localidades andaluzas que vieron crecer a célebres figuras de nuestra historia, como al compositor gaditano Manuel de Falla que creció allí o una de sus máximas figuras locales, el poeta Federico García Lorca, a quién se le recuerda en cada uno de sus encantadores rincones.
"Granada es una ciudad de ocio, una ciudad para la contemplación y la fantasía, una ciudad donde el enamorado escribe mejor que en ninguna otra parte el nombre de su amor en el suelo", escribía el poeta en su 'Elegía Humilde'. Porque Granada habla de amor en cada una de sus calles. Pocos se libran de transitar por ellas sin caer rendidos ante su encanto. Incluso hay quienes dicen que de Granada se puede volver con el síndrome de Stendhal. Pero si Granada habla, además, de algo, es también de historia y de cine.
Rincones de película
Fue escenario de emblemáticas producciones como 'Doctor Zhivago', que escogió una vista de Sierra Nevada desde La Calahorra para una de sus escenas más relevantes. También tuvo un cameo en las películas de 'Caníbal' (2013) o 'Heart Attack' (2015), en la quinta temporada de la serie Black Mirror (2019) y hasta en Corea gracias al romance Recuerdos de la Alhambra (2018).
"La escuela de guitarreros de Granada es reconocida a nivel mundial desde el siglo XIX porque aquí se desarrolló la guitarra tal como la conocemos hoy, llamando la atención de artistas de la talla de Eric Clapton", nos cuenta Piedad Sánchez, fundadora de We Love Grx y vicepresidenta de Granada Alta Cultura.
Y si hablamos de música granadina, resulta imprescindible mencionar a Pablo Martos y a Mariola Cantarero. El primero: violinista, compositor y director de orquesta y Premio Joven de Andalucía a la Solidaridad 2013 por su imparable trayectoria. Mariola, soprano española, es una de las máximas representantes del repertorio belcantista. Dos figuras de la lírica y la música clásica cuyo eco ha conseguido cautivar con mucha fuerza más allá de nuestras fronteras.
Nada mejor que pasear por las calles granadinas acompañada de una una local y amante de la ciudad como ella, que nos cuenta, para Harper's Bazaar España, algunos de sus entresijos más desconocidos: "Existen numerosos guitarreros que desarrollan su trabajo en la ciudad y reciben estudiantes y artesanos de todo el mundo para aprender este gran arte. El mundo del cine, el coreano concretamente, se ha hecho eco recientemente con una serie que se puede ver en Netflix llamada 'Recuerdos de la Alhambra' donde la protagonista se forma precisamente en el taller de uno de nuestros talentos más internacionales, Manuel Bellido".
Un cóctel local y vanguardista
Granada ya es internacional, pero continúa respirando gotas de aromas árabes que bañan su historia, mezclándolos a la perfección con su colonia peninsular. Tiene esa parte cosmopolita que gusta a todo buen amante de las urbes y esa magia antigua de casas bajas, colores en contraste y tejados de ladrillo que adorna sus calles estrechas, cuestas empinadas y parques. Las tiendas locales de toda la vida le dan la mano a las franquicias en perfecta sintonía y conviven con las de souvenirs que dan la bienvenida a los turistas.
Tan relevante es el valor por lo local y la coexistencia entre esta esencia y los nuevos tiempos, que todavía sus calles acogen la Lencería Eugenia de Montijo, una serie de comercios que iniciaron su andadura en 1908, primero, en el mismo espacio y hogar en el que nació, como su nombre indica, la aristócrata y emperatriz Eugenia de Montijo. Su presencia se fue expandiendo por la ciudad y su negocio ahora ofrece desde corsetería, hasta mercería o productos infantiles. Un emblema histórico que todavía permanece en esta ciudad.
Un año antes de la inauguración de este negocio, se abrió en la ciudad una parada obligatoria para todo buen amante del pasado, pero también de un buen desayuno de churros y chocolate. Así nos lo cuenta Juan M. Agrela, responsable de la web gastronómica GastroHunter. Como gran conocedor de la ciudad y de la gastronomía de la misma, nos habla de la cafetería Bib-Rambla, ubicada en la plaza que lleva su nombre. Se trata de un establecimiento -con una bella terraza- que se ha ido restaurando con el paso del tiempo pero que todavía mantiene su espíritu. Es de esos lugares en los que parece que el tiempo no pasa y ha ganado numerosos premios y distinciones a lo largo de su trayectoria. No es de extrañar si tenemos en cuenta que esta cafetería permaneció abierta, incluso, en la época de la guerra civil.
Dormitorio de célebres
En Granada están empadronados más de 230 mil habitantes, pero su vida universitaria hace que esta cifra ascienda en 50 mil personas más. Porque preguntar por una ciudad universitaria en España es sinónimo de buscar entre las respuestas a Granada que acoge a estudiantes locales, nacionales e internacionales cada año llegando a rondar a lo largo de su provincia, el millón de habitantes.
Se trata de un lugar en el que todas las vertientes artísticas conviven en perfecta armonía ofreciendo a todo visitante una amplia oferta de ocio a la que resulta complicado resistirse. Cada año, además, desde hace cuatro ediciones, Granada celebra la Alta Cultura, unas jornadas de varios días en los que el arte y la moda se dan la mano y se combinan con otras disciplinas como el cine, la poesía y la música para mostrar el rico patrimonio cultural y monumental de la ciudad. Una fecha marcada en la agenda y perfecta para disfrutar de la ciudad por todo lo alto.
"Granada es un crisol de culturas y cualquier paseo puede estar lleno de magia si sabes encontrar a la persona que de verdad te lo muestre", señala Piedad quien, además, como nativa granadina nos recomienda varias rutas para conocer la ciudad con una nueva esencia, más alejada de la turística y más cerca de la mundana y real, no sin antes, eso sí, hablarnos de varios enclaves magníficos para dormir durante los días de visita.
El primero del que nos habla se trata del Alhambra Palace, un edificio que en su día fue proyecto del noble, político y empresario Julio Quesada-Cañaveral, VI Duque San Pedro de Galatino y Conde de Benalúa. En sus estancias antes se albergaba un casino en el que se daban cita las personalidades de la alta sociedad de la ciudad y hasta de Hollywood, como Vivien Leigh u Orson Welles. Ahora, en cambio, es un hotel de cinco estrellas que presenta una de las terrazas con uno de los horizontes más completos y suites dignas de película que mezclan en combos perfectos la decoración minimalista y contemporánea con el arte árabe de muchas de sus paredes.
"Otras referencias en este campo podrían ser el Parador de San Francisco, ubicado junto a la Alhambra, compartiendo jardines, o el Washington Irving que permaneció cerrado durante muchos años y se reinauguró hace unos cuatro o cinco", nos cuenta Piedad antes de dar paso a las rutas.
No todo es la Alhambra
Una vez establecidos los puntos estratégicos en los que descansar por la noche, conocer parajes más allá de la Alhambra resulta determinante si lo que se busca es sumergirse en la esencia granadina más profunda. Por consejo de Piedad, más allá de las magníficas bodegas,"conocer el Albaicín, el Sacromonte, la zona norte de la provincia de Granada con el desierto de Gorafe, ir a la Costa Tropical, descubrir el parque natural de Sierra Nevada, las Alpujarras, o ir a conocer el manantial de Lanjarón pueden ser actividades muy atractivas y diferentes".
Y otra parada de antoja como única: el Patio de los perfumes. Un palacio renacentista del siglo XVII que ofrece una auténtica experiencia sensorial para quien lo pise. Puedes acudir a una cita guiada y conocer las esencias y aromas nazaríes reviviendo la historia de la mano de guías que te explican cuál era el estilo de vida de las mujeres que allí habitaban y cuáles eran sus rituales de belleza. Conocerás su museo, su patio, el salón VIP y otras sorpresas olfativas.
Un destino para saborear
Si algo caracteriza a Granada, además de la estética y la historia, es su gastronomía. Porque sí: es de esas ciudad en las que nunca falta la tapa con tu bebida. Un placer que permanece en pocos lugares de España y que cada día parece desaparecer en más ciudades.
Nos fiamos del gusto y el conocimiento de Juan M. Agrela: "Granada es mucho más que tapas. Actualmente cuenta con una nueva generación de cocineros que están apostando fuertemente por una gastronomía de calidad y una atención exquisita a sus comensales. Podría recomendar un amplio número de restaurantes...Faralá,Bar FM, Alquería de la Vega, Le Bistró by El Conjuro, Atelier Casa de Comidas, Damasqueros, Arriaga...", no cuenta, señalando, eso sí, a un chef que despunta especialmente: Javier Feixas.
"Él no está solo en esta nueva era de cocineros que están apostando por el posicionamiento de la provincia. Otras figuras destacadas son: Raúl Sierra, Ismael Delgado, Lola Marín, José Manuel Magín, Jorge Matas, David Perea, Marta Fernández… Y otros cocineros muy destacados de la provincia que han dedicado su vida a la cocina y a apostar por el posicionamiento de Granada a nivel gastronómico como Pepe Pedraza, chef del Restaurante La Ruta del Veleta y Paco Rivas, chef del restaurante del Hotel Alhambra Palace.
Eso sí, si quieres degustar el sabor más puro y no sabes bien qué platos escoger, hay algunos que no pueden faltar en tu ticket de restaurante. Si pisas Granada y decides comer en uno de sus restaurantes, tendrás que probar el pulpo seco, las habas con jamón, las migas, la olla de San Antón o, si te alejas un poco de la ciudad y visitas otros pueblos, como Motril, su quisquilla no puede faltar en tu menú.
Sus alrededores: un combo al gusto de todos
Este pueblo costero es uno de los más conocidos de la comunidad, pero a tan solo 15 minutos en coche se encuentra Salobreña, un enclave de casas blancas de la Costa Tropical. Era el lugar sobre el que se asentaba la cárcel real, pero también el pueblo en el que veraneaban los reyes del Reino de Granada. Ahora Salobreña es sinónimo de turismo y de ocio ya que ofrece una gran cantidad de actividades,siendo famosas las acuáticas. También si decides hacer una parada en este pueblo será obligatorio que conozcas su castillo -lugar antiguo de defensa- y Casco Histórico, rodeado de casas decoradas con macetas de colores en sus fachadas, cactus y llamativas flores.
Sin ser costero, pero de gran belleza, se encuentra en su extremo oriental Moclín, un pueblo más rural y natural, perfecto para los amantes de los paisajes de piedra. En él abundan las cuevas, las pinturas rupestres y las ruinas que todavía conservan elementos de civilizaciones pasadas. Y a media hora en coche, como Piedad nos cuenta, se encuentra Montefrío, un pueblo considerado una de las "7 maravillas de Granada".
Te cautivarán sus miradores (dicen que es uno de los lugares con mejores vistas de la comunidad), sus caminos perfectamente trazados para hacer diferentes rutas de senderismo, sus rincones monumentales y sus estrellas calles, que todavía mantienen el legado árabe.
De ayer a hoy. Granada ha sido, es y será siempre fruto de inspiración para cualquiera que la visite. Remontándonos a la cultura lo vemos. Miguel Ríos cantaba por su vuelta a esta ciudad ("vuelvo a Granada, vuelvo a mi hogar, entre mi gente encontraré la felicidad"). "El paseo de los tristes alegrar" es la temática sobre la que versa la contemporánea canción 'LN Granada' de Supersubmarina y, hasta en poesía, Rafael Alberti, que era gaditano, le dedicó un poema, Balada del que nunca fue a Granada ( "Si altas son las torres, el valor es alto. /Venid por montañas, por mares y campos/ Entraré en Granada").
